Mediante un oficio enviado a la presidenta del Legislativo, el Gobierno observó la norma que facultaba al Banco Central de Reserva del Perú (BCR) a fijar tasas de interés máximas y mínimas cada seis meses para regular el mercado financiero.
El Ejecutivo observó la autógrafa de ley que fija topes a las tasas de interés bancarias, que fue aprobada a fines del año pasado por el Congreso de la República.
Mediante un oficio enviado a la presidenta del Legislativo, el Gobierno observó la norma que facultaba al Banco Central de Reserva del Perú (BCR) a fijar tasas de interés máximas y mínimas cada seis meses para regular el mercado financiero.
“La aplicación de topes a las tasas de interés es una forma extrema de intervención estatal que, además de vulnerar el principio de la libre competencia, afecta los mecanismos de transmisión de información y tiende a desaparecer los incentivos en el mercado”, señala el documento.
Además de la afectación a la libre competencia e incentivos del libre mercado, el oficio explica que esta norma traería problemas como la desintermediación financiera, incremento de gastos como comisiones asociadas al crédito y una caída en la oferta de créditos de consumo y créditos MYPE.
“Habría un cambio en la composición del portafolio de créditos en el sistema financiero, causado por la necesidad de las empresas de destinar los recursos que emplean a clientes con un nivel de riesgo menor”, indica el Ejecutivo.
El Gobierno también advierte que la autógrafa del Congreso significaría un retroceso en términos de inclusión financiera, así como un aumento del crédito informal y la inseguridad ciudadana.
Fuente: El Comercio