El contralor de la República, Nelson Shack, afirmó que los gobiernos regionales casi no tendrán tiempo para realizar una transferencia de cargo efectiva, pues la segunda vuelta se realizará en diciembre.
El inicio de la administración de nuevas autoridades municipales y regionales, ha llevado al Banco Central de Reserva (BCR) a estimar que la inversión pública tendrá un 0% de crecimiento en el 2023, incluso tomando en cuenta el impacto del plan Impulso Perú del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Pero la situación para la ejecución de obras podría ser, incluso, más complicada, por la realización de la segunda vuelta electoral en nueve regiones del país, según los datos preliminares que reportó ayer la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), ya que ninguno de los candidatos superó el 30% de votos válidos.
El contralor de la República, Nelson Shack, afirmó que el desarrollo de la segunda vuelta en los gobiernos regionales tendrá como consecuencia problemas en la transferencia de gestión, entre las autoridades salientes y las entrantes.
Shack advierte que de por sí hay preocupación por los procesos de transferencia de las regiones donde no habrá segunda vuelta, lo que afectará la inversión pública en el primer cuatrimestre del próximo año. Mientras que en los gobiernos regionales que van a segunda vuelta no habrá proceso de transferencia, pues las elecciones serán en diciembre y las nuevas autoridades recibirán sus credenciales después de Navidad. Recién en ese momento podrían conformar equipos de transferencia.
“Como se pueden imaginar, un proceso de transferencia no se puede hacer en dos días. No va a ser un proceso de transferencia de gestión, va a ser un acto de fe. Al no haber este proceso se va a reducir enormemente el ritmo de ejecución del gasto público durante el primer cuatrimestre del año (2023)”, refirió.