El 2022 fue un año histórico para la recaudación de canon minero. Según el Ministerio de Energía y Minas, S/ 7 844 millones fueron a las cuentas de gobiernos regionales, municipios y universidades. Las regiones que mayores montos recibieron fueron Áncash, Arequipa, Tacna, Ica y Moquegua; sin embargo, la ejecución de proyectos es mínima, pues los gobiernos regionales solo ejecutaron el 63 % y los municipios el 61 %.
Basta revisar indicadores de desarrollo humano de Puno. Varios son los factores que empujan la ineficiencia. Puno aloja una de las minas más importantes de estaño. Gracias a los buenos precios del metal su gobierno regional recibió tres veces más por canon que años anteriores. Sin embargo, su nivel de gasto en proyectos de inversión alcanza el 63%.
El director de Videnza Consultores y exministro de Economía, Luis Miguel Castilla, sostiene que “esta narrativa” carece de fundamento. Hay muchos recursos de la renta minera en el Estado peruano que se desaprovechan.
“Se debe mejorar la calidad de los recursos humanos. Solo el 10% de los funcionarios a cargo de la inversión pública del país es idóneo. Además, se debe reducir la alta rotación, el gerente general de los gobiernos regionales es importante para la formulación de políticas de gestión”, explicó.
Además, el 84% de las autoridades regionales tienen investigaciones pendientes por delitos de colusión, negociación incompatible, peculado, malversación. Hace más de una década las regiones mineras no recibían tanto dinero por canon.