Patricio Lewis, miembro del equipo de la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes), destacó el rol del Estado para dar respuesta a las necesidades de los agricultores.
La producción de los principales cultivos nacionales, como la papa, la quinoa y otros, está enfrentando adversidades debido al Fenómeno del Niño. El Ministerio de Agricultura informa que la siembra de cultivos temporales ha disminuido en un 4.2% con respecto al año anterior, marcando la mayor reducción en años recientes.
Así lo señaló Patricio Lewis, miembro del equipo de la Red de Estudios para el Desarrollo (Redes), quien además recordó que entre agosto de 2022 y mayo de 2023, se han sembrado aproximadamente dos millones de hectáreas de alrededor de treinta cultivos. Esto representa un retroceso del 4.2% en comparación con el mismo periodo de la campaña previa, y diversos cultivos han sido afectados, lo que ha llevado a un incremento de precios.
En cuanto al fenómeno del Niño a nivel global, se prevé que tendrá un impacto significativo en la agricultura. Lewis explica que habrá un impacto fuerte en las cosechas y la producción agrícola, dado que los rendimientos serán notablemente menores debido a cambios abruptos en el clima, sequías en el sur del país e inundaciones en el norte. La infraestructura también se verá afectada, con cierres de carreteras que dificultarán el transporte y almacenamiento de alimentos.
“Es importante el rol del Estado acá, porque tiene que empezar a poner no solamente maquinaria para que las infraestructuras siempre estén operativas, sino también por empezar a mejorar y dar capacitación a los agricultores en temas de irrigación, darles títulos en las tierras, acceso a la electricidad, en los agricultores en cooperativas para que obtengan financiamiento y promover la diversificación de productos”, refirió Lewis.