Al cierre del primer trimestre de 2024, Piura ha registrado la mayor caída económica entre todas las regiones del país, con una reducción del 8,6%. Este descenso, el más pronunciado a nivel nacional, se debe al mal desempeño de los sectores de pesca y agricultura, según explicó César García, economista de Redes. “La situación debe preocuparnos porque si la economía de la región decrece, esto afecta la creación de empleos y tiene un impacto en el ingreso económico de las familias”, advirtió.
Durante el primer trimestre de este año, el sector pesquero cayó un 20,7% debido a la falta de especies marinas en los puertos de Paita, Bayóvar, Talara y Parachique, afectando la producción de congelados. La manufactura, que en 2022 representaba el 14% de la economía regional, también sufrió el impacto. La producción de harina y aceite de pescado se redujo más del 50% por el fin de la segunda temporada de pesca de 2023 en las zonas norte y centro, agravando la crisis en una de las principales actividades económicas de la región.
El sector minero, que aporta casi el 11% a la producción regional, retrocedió un 3% debido a la menor producción de petróleo crudo (-6,9%). Sin embargo, la extracción de oro aumentó un 33,8%, contrastando con el panorama general. El sector agropecuario, que creció en promedio un 3,9% anual entre 2013 y 2022, sufrió una caída del 34,3% en el primer trimestre. La disminución en cultivos clave como frijol caupí (-98,7%), uva (-96,2%), mango (-79,7%) y arroz (-32,3%) fue la causa principal, aunque el aumento en arándano (404,2%), caña de azúcar (37,3%) y plátano (13,2%) ofrece un leve respiro.
En este contexto, el economista enfatizó la importancia de garantizar un clima de confianza y de estabilidad. “Entonces para ello es importante garantizar un clima de confianza y estabilidad para sostener y para recuperar la senda de crecimiento de la región en el mediano y largo plazo para así elevar la calidad de vida de los piuranos y piuranas”, concluyó.