En el centro poblado de Tajamar, distrito de Bellavista – Sechura, un grupo de 35 mujeres ha logrado convertir la producción de yogurt natural y otros derivados lácteos en una fuente sólida de desarrollo económico. Se trata de la Asociación de Mujeres Emprendedoras de Tajamar (AMET), que, gracias a una inversión inicial en equipamiento y capacitación técnica en Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), ha experimentado un crecimiento notable en sus ingresos.
En menos de 16 meses, los ingresos mensuales de la asociación registraron un crecimiento equivalente a doce veces su ingreso inicial. Pero más allá de las cifras, el verdadero logro está en el cambio de vida que han experimentado sus integrantes: más del 80% de las utilidades obtenidas fueron destinadas a la educación de sus hijos. “Gracias al yogurt natural he podido pagar la educación de mis hijos. Este año, mi hijo ingresó al COAR Piura y me dice que soy su ejemplo de superación”, comparte con orgullo Laura Chunga Zeta, una de las integrantes de AMET.
Desde el 2023, la Compañía Minera Miski Mayo, en alianza con diversas entidades, viene impulsando un programa integral fortalecimiento de capacidades para este grupo de mujeres, que combina capacitación técnica, asesoría especializada y financiamiento mediante capital semilla, promoviendo el liderazgo femenino en el ámbito productivo y fomentando una cultura de empoderamiento laboral. A través de talleres prácticos para la elaboración de sus productos, así como el acompañamiento en la creación y gestión de planes de negocios, las participantes accedieron a herramientas clave para transformar sus ideas en emprendimientos sostenibles y exitosos.

Como parte de estas acciones, AMET participa activamente en las Mini Ferias organizadas por la empresa minera dentro de sus instalaciones, permitiendo visibilizar sus productos, conectar con nuevos clientes y fortalecer su presencia en el mercado local
El éxito de AMET demuestra que con innovación, capacitación y visión, es posible transformar actividades tradicionales en empresas con alta rentabilidad social y económica. “Actividades como estas empoderan a las mujeres que trabajan con esfuerzo y compromiso. Hoy, ellas no solo generan ingresos para sus familias, sino que también consolidan su independencia económica, lideran asociaciones productivas y se convierten grandes ejemplos de transformación en sus comunidades”, destacó el Mgtr. Joel Chunga, representante de Gestión Social de Miski Mayo.