Investigadores de la Universidad de Piura (UDEP) desarrollaron un proyecto pionero en Perú que reutiliza el bagazo de la caña de azúcar para elaborar un panel constructivo que contribuye a brindar confort térmico a las viviendas ubicadas en zonas andinas y expuestas a las heladas e incluso a aquellas localizadas en zonas de abundante calor en la costa y selva.
El proyecto se desarrolló de manera interdisciplinaria con varios expertos de la Universidad de Piura, y contó con el apoyo de la empresa Caña Brava como socio estratégico que suministró del bagazo de caña de azúcar necesario para la investigación aplicada y, además, brindó información sobre las características de este residuo agrícola.
“Nuestra investigación se alinea con los principios de la economía circular y aprovecha un residuo agrícola como el bagazo de la caña de azúcar, que es cuantioso en Perú. A partir de esas fibras, que se emplean tradicionalmente para abono y combustible en ciertas industrias, se investigó si era posible desarrollar un panel constructivo con la mínima conductividad térmica posible para ayudar a conservar la energía o calor en las viviendas, mejorando con ello la calidad de vida de sus ocupantes”, manifestó David Resano, investigador principal y coordinador general del proyecto de investigación, al citado medio.
El proyecto constó de cuatro fases: el estudio de las propiedades físico-químicas del bagazo de la caña de azúcar, la investigación de procesos de fabricación, la elaboración de los primeros prototipos, la producción de paneles constructivos en dimensiones idóneas para su comercialización y, finalmente, se implementó un modelo de ensayo colocando los paneles constructivos en una vivienda altoandina de la comunidad campesina de Altos de Poclús, ubicada en el distrito de Frías, provincia piurana de Ayabaca