El Perú solo tendrá un crecimiento de 2% durante este 2023 y el 2024, según proyecciones de la calificadora de riesgo Fitch Ratings. La proyección de crecimiento es más baja que el promedio de países que tienen calificación «BBB», el mismo rating que tiene la deuda peruana.
Un reciente reporte, difundido por Bloomberg, indica que Fitch Ratings considera que la inestabilidad política está planteando un riesgo material a la baja para la inversión externa y el crecimiento económico. «Muchos inversionistas y mercados esperan cualquier señal de cambio político para plantearse futuras inversiones», señala Fitch.
Por ahora se anticipa que se tendrá una limitada actividad del mercado internacional de deuda corporativa este 2023 y advierte sobre los riesgos que enfrenta la trayectoria macrofiscal del país en el mediano plazo si las condiciones adversas se mantienen.
«El debilitamiento de la inversión y de las perspectivas económicas, si persiste este 2023 y el 2024, como prevé Fitch, podría socavar la trayectoria macroeconómica y fiscal del soberano, en relación con sus homólogos ‘BBB’. Las políticas monetarias y fiscales más restrictivas ralentizaron la demanda interna», indica el informe.
El director asociado de la agencia, Héctor Collantes, apunta a que las causas del malestar social en Perú que se ha vivido en los últimos meses, tras la asunción al mando de Dina Boluarte, son múltiples, pero remarcó que el principal desencadenante es político «y los problemas se concentran geográficamente», por ello los efectos se distribuyen de forma desigual.
«Aunque los bloqueos de carreteras activos se han reducido a seis el 27 de febrero de 2023 desde un máximo de 127 el 19 de enero del 2023 y los principios proempresariales del marco legal peruano se mantienen, no hay una salida clara de la crisis», precisó a Bloomberg.