Solo el 50% de la demanda esperada es cubierta por el primer nivel de atención médica, y el 95% de los establecimientos públicos carecen de infraestructura y equipamiento adecuados.
El sistema de salud público en Perú enfrenta importantes desafíos estructurales que han sido exacerbados por la pandemia de COVID-19, según un informe de Videnza Consultores por encargo de ComexPerú. “A pesar de que el 91.7% de los peruanos cuenta con algún tipo de seguro estatal, el sistema sigue fragmentado y presenta graves deficiencias. Solo el 50% de la demanda esperada es cubierta por el primer nivel de atención médica, y el 95% de los establecimientos públicos carecen de infraestructura y equipamiento adecuados”, refiere.
El informe también advierte sobre el insuficiente gasto público en salud. En Perú, la inversión per cápita en este sector es de solo S/ 523, mientras que en Chile y Colombia es de S/ 1,679 y S/ 1,248, respectivamente. Esta falta de financiamiento ha llevado a que cada vez más peruanos acudan a farmacias como su principal lugar de atención, lo que ha incrementado el gasto de bolsillo en un 29% en los últimos años.
Ante esta situación, se proponen diversas medidas para mejorar el sistema de salud, como fortalecer el Seguro Integral de Salud (SIS) y mejorar la interoperabilidad de los datos mediante la implementación de la historia clínica electrónica. Así como, el crear un fondo universal para cubrir tratamientos de alto costo y fomentar la construcción de hospitales mediante asociaciones público-privadas. Con estas reformas se busca aumentar la eficiencia y accesibilidad del sistema de salud, pero requieren una mayor inversión y compromiso por parte del Estado.