Al cierre del 2024, el 19.5% de la población entre 5 y 17 años de la región Piura estuvo involucrada en algún tipo de trabajo, dentro o fuera del hogar, lo que equivale a 104,431 menores de edad, según estimaciones de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho) consignadas por ComexPerú.
La tasa fue menor en 5.7 puntos porcentuales respecto al 2023 y significó una reducción de 35,435 casos. Con este resultado, Piura se ubicó entre los 16 departamentos donde el trabajo infantil disminuyó el año pasado.
Pese a ello, este problema “sigue siendo una realidad extendida en el país”. “El trabajo infantil plantea una disyuntiva crítica: dedicar el tiempo a trabajar o invertirlo en estudiar. Esta decisión tiene consecuencias sobre la capacidad de las personas para insertarse en empleos adecuados. Como advierte el Banco Mundial, los ingresos perdidos por menor escolaridad superan, a largo plazo, cualquier ganancia temprana derivada del trabajo infantil”, refirió el gremio.
Resultados nacionales
En 2024, el 22.6% de la población entre 5 y 17 años estuvo involucrada en algún tipo de trabajo, dentro o fuera del hogar, lo que equivale a 1.8 millones de menores de edad. La cifra significó una reducción de 168,099 casos en relación con 2023. En detalle, la tasa de trabajo infantil es mayor en zonas rurales, donde se alcanzó el 53.1% el año pasado. Esta situación afectó a 948,378 menores de edad. En las zonas urbanas, por el contrario, la incidencia disminuyó al 13.9%.

En el Perú, la Política Nacional Multisectorial para las Niñas, Niños y Adolescentes al 2030 (PNMNNA) —elaborada en 2021 y actualizada en 2024— se presenta como el marco rector en materia de infancia y adolescencia. Sin embargo, entre sus servicios definidos, apenas 2 de 47 atienden directamente la problemática del trabajo infantil. Mejorar la inspección laboral, los servicios educativos públicos, reducir la informalidad y promover el crecimiento económico son fundamentales para revertir la situación.