El sector agropecuario desempeña un papel crucial en la generación de empleo, considerando que emplea alrededor del 30% de la mano de obra.
La agricultura peruana ha logrado sortear con éxito el escenario de la pandemia. Según el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), el valor agregado bruto del sector agropecuario sumó -en el primer trimestre del 2023- un total de S/ 8,754 millones (-0.2% comparado con el período equivalente de 2022). De esta cifra, la mayor parte corresponde al subsector agrícola, el cual aportó un total de S/ 5,167 millones (59% del total), con un incremento del 0.3% respecto del mismo período de 2022.
En ese sentido, los agronegocios en Perú han demostrado ser un pilar fundamental para la economía del país, destacando un dinamismo significativo y sostenido. “El sector agropecuario no solo contribuye a la salud financiera de la nación, representando aproximadamente el 15% del Producto Bruto Interno (PBI), sino que también desempeña un papel crucial en la generación de empleo, considerando que emplea alrededor del 30% de la mano de obra, siendo aún más relevante en las zonas rurales del país”, explica Ernesto Gallo, docente de la Maestría en Agronegocios del PAD – Escuela de Dirección de la Universidad de Piura.
Una de las razones detrás del éxito de los agronegocios en Perú es la exportación de productos de alto valor intrínseco, conocidos como PAAVI (Productos Agrícolas de Alto Valor Intrínseco), que incluyen arándanos, uvas, paltas, espárragos, mangos, mandarinas y banano orgánico. Para Gallo, esta estrategia ha impulsado una balanza comercial agraria positiva y ha generado una serie de efectos multiplicadores en diferentes sectores como transporte, servicios e insumos.
“Los cultivos PAAVI, intensivos en mano de obra, también han permitido la creación de empleos en las estaciones de cosecha en diversas regiones del país, por ello es necesario tener profesionales capacitados en todos los procesos de la agroindustria, que puedan sumar en el crecimiento del sector”, acota.
En relación con el crecimiento futuro del sector, Perú se encuentra en una posición envidiable en el mercado global debido a su liderazgo en la producción de PAAVI. A pesar de enfrentar barreras sanitarias en algunos mercados clave, como China y Estados Unidos, existen oportunidades para diversificarse y expandir la exportación de productos de alto valor intrínseco hacia Europa y otros destinos.
“La entrada proyectada de 40.000 hectáreas de tierras irrigadas promete aumentar la oferta, lo que hace imperativo explorar la diversificación a través del sistema de inteligencia comercial. Entre los productos que han tenido un impacto significativo en el sector, destaca la exportación de arándanos, uvas y otros PAAVI”, afirma el docente.
Estos productos no solo generan un gran impacto mediático al convertirse en líderes de exportación, sino que también impulsan la economía local al utilizar mano de obra y fomentar efectos multiplicadores a lo largo de la cadena de valor. Las regiones de La Libertad, Piura y Lima han demostrado un notable crecimiento en el sector de agronegocios en los últimos tiempos, y se prevé que estas regiones continúen prosperando en el futuro.
“Los agronegocios abarcan una amplia gama de actividades a lo largo de la cadena de valor, desde insumos y producción hasta logística y comercialización. El sector también involucra organismos de soporte, como universidades, ONGs, bancos y el gobierno, que colaboran para impulsar su desarrollo sostenible. La sofisticación creciente del sector exige una fuerza laboral calificada y capacitada en diversas áreas, desde operaciones técnicas hasta gestión y administración”, finalizó Gallo.