Se realizan tamizajes de violencia que son evaluados para una posterior asistencia por parte del Centro Emergencia Mujer y Poder Judicial.
Ante los casos de violencia contra la mujer y los niños, el sector Salud, el Centro de Emergencia Mujer (CEM) y los operadores de justicia, que incluyen el Poder Judicial y el Ministerio Público en Piura han fortalecido su coordinación para brindar una atención efectiva y oportuna a las víctimas. El obstetra Pablo Zacarías García, coordinador de Estrategia Sanitaria de Salud Sexual y Reproductiva de la Diresa Piura, destaca la importancia de esta articulación, especialmente durante el periodo del puerperio, donde se realiza un control riguroso tanto de la madre como del recién nacido.
“Se realiza un tamizaje de violencia, aplicando un instrumento ya elaborado por el Ministerio de Salud, si ese instrumento resulta positivo adicionalmente la paciente pasa a una interconsulta con psicología para que se puedan hacer los exámenes más específicos y detectar el tipo de trastorno de abuso que pueda estar experimentando la mujer”, refirió.
Este enfoque no se limita únicamente a la salud física y mental de la mujer, sino que también se extiende al cuidado del niño. Se realizan controles de crecimiento y desarrollo, donde se pueden identificar signos de violencia o situaciones de riesgo.
“La coordinación entre el sector Salud y el Centro de Emergencia Mujer se realiza en el marco del programa Aurora, bajo el Protocolo de Adaptación Conjunta. Este programa facilita la comunicación entre los establecimientos de salud y los centros de atención a víctimas de violencia, asegurando una respuesta rápida y efectiva ante los casos detectados”, acotó.